Virgínia
Se murió Natalia, Virgen que tenía
en los ojos muchos sueños y delirios,
y en los tristes labios todos los martirios
de la cruel anemia que la consumía.
En el blanco lecho su cara fulgía
como nívea estrella sobre un mar de lirios,
mientras en la alcoba los trémulos cirios
llovían miradas de melancolía….
Al vésper, en andas, en hombros de amigos
iba lentamente para el Camposanto.
……………………………………………………….
Después, cuando todos a casa Volvían
mudos, pensativos….,como rubios trigos
vieron que en el cielo, radiosas de encanto
todas las estrellas reían …reían
ALMA
La hermosa, arrebatada, lo envolvió en sus ardores
sus brazos lo anudaron sobre su seno astral.
Y entre besos, mordiscos, suspiros y estertores,
—toda la ardiente gama de los rojos amores …..
pasó la noche entera, satánico y sensual
.
La aurora en la montaña divina sonreía
cuando el mancebo dijo: “Sueltame, siento hastio”
Después…..domaba un potro, tumbaba un monte, abría
para su siembra, riegos; luego, se zambullía,
como un pez, en el río….
DON JUAN
Don Juan salia del infierno. Había
envejecido y padecido tánto
que apiadado el Seño de su quebranto
lo llamó al Paraíso. Lo traía
O
en una nave Caronte. Melodía
de etérea flauta acompañaba el canto
de un coro celestia, que bajo el manto
del infinito azul, lirios abría
O
vió Don juan entre cármenes un monte,
y en su cima un alcázar trasparente,
y pregunta : sitio de amor, Caronte?
O
No; de oración,…el Paraíso eterno.
Y Don Juan blasfemando de repente,
torció el timón y retornó al infierno.
ENSUEÑO
Escucha, encantadora fugitiva
que interpretar mi corazón no quieres :
tu palidez mortal me tiene enfermo
y presiento, al mirarte, que te mueres…..
O
Es tan débil tu cuerpo delicado,
tu vida está de levedad tan llena
que un hálito veloz puede quebrarte
como un pétalo frágil de azucena
O
Surgir parece a tu redor la niebla
como para envolverte en un misterio,
y en tu camino palpitando dejas
un lejano rumor de cementerio.
O
Finas esquilas en tu voz sollozan,
blancor de leche en tu pupila vaga,
y tu reir parece hilo de luna
que en la espuma del mar vibra y se apaga
O
Frágil blanca de niebla y errabunda
como del aura leve suspendida,
pareces una virgen temblorosa
del hondo seno de la tumba huída
O
Frágil, blanca de niebla y errabunda …
y cuanto más sutil y visionaria
pasa por mi fantástico camino
más pura es tu belleza funeraria,
O
y más te quiero fugitiva niña
que temes al contacto de mi mano,
porque vamos, yo ardor, hacia la vida,
y tú, vapor de ensueño, hacia el arcano
VERSOS.
!Oh, tú, locura mía, vaso lleno
de jugo y suave olor y gentileza!
Vierte en mi ser lo delicado y bueno
que encierra tu romántica belleza !
O
Tú que naciste para amar las cosas
que tienen luz y susurrar de abejas ;
que si suspiras hechizado dejas
todo el ambiente en suavidad de rosas ;
O
Tú, inmaculada de mis níveas rimas
que, novia virginal, tus sienes doras
con gasas tenues, como blancas cimas
bajo el ala ideal de las auroras ;
O
Tú que en los labios tienes la palabra
que da el agua y la miel y la ventura
a los dolientes que el destino labra
una fúnebre copa de amargura
O
Tú dulce rosa mística, ! sé mía !
Mía no más, como en mi ser te siento !
Mía en la vibración del pensamiento
y en mis nervios y en todo: sinfonía !
O
Sé tú lo que yo sueño: única lira !
Sé tú lo que ambiciono: cima blanca !
Y con tu niebla y tu canción arranca
lo humano y triste que mi ser respira!
O
y yo, que soy de tus virgíneas aresias
gondolero de amor en mar sereno
para volver cuanto me das de bueno
te doy mi vida azul, ! toda fragancia !
O
Mi vida azul, la que al soñar contigo
a tí se enlaza y por tus formas rueda ;
la que es, en tu mirar, júlgida seda,
rosa en tu seno y en tu frente trigo,
O
Mi vida azul, la que entre sueños vaga
como entre nieblas matinal sonrisa,
esa vida gentil en que se embriaga
cuanto en tí vibra y suspirando belleza.
A LA MUCHACHA ARISCA
A la muchacha arisca,
Que en la ciudad morisca de Toledo,
Se santiguó tres veses al mirarme
Y huyó llena de miedo,
Le hubiese dicho una secreta cosa
Tan dulce, espiritual, tan diluída
En una clara frase melodiosa,
Que ella al instante hubiera
Dislocado en rosal de primavera
Su pálida sonrisa;
Pero no tuve tíempo: huyó ligera
como la onda azul, como la brisa.-
0
Hoy, junto al mar Cantábrico, que salta
Hecho un león el peñascal, y al anca
De la roca más alta
Prende un mechón de su melena blanca,
Soñando evoco la muchacha arisca,
Que en la ciudad morisca de Toledo,
Se santiguó tres veses al mirarme
Y huyó llena de miedo .-
O
Qué me faltaba? Todo lo tenía !
Oro sonaba en mi porta-moneda,
Iba trajeado como un lord, lucía
Mi ojal su flor; y me adulaba un guía
que calzaba cual yo guantes de seda.
O
Y así, sentimental, triste, abatido
Por mi enorme fracaso,
Entréme al primer bar que hallé al acaso
Y pedi de beber; y me sirvieron
Un soberbio Solera; y se diría
que aquello era el resúmen
Del aire de oro en que se envuelve España
Removido y filtrado por un númen
Con claver andaluz y miel de caña
O
Y fuí feliz y con la fantasía
En leyendas muslímicas borracha
Sali coji el tren, dije adiós al guia
y olvidé la muchacha
Iba Cristo
Iba Cristo muy lento, muy triste y tan paciente
como la mansa roca bajo el furor del mar,
incendio eran sus miembros, incendio era su frente
y era su manto púrtura, la pira del poniente
serpenteando en las carnes de un mustio lirio albar,
Y el lático vibraba
y en sus miembos se hundía ;
y con la cruz al hombro Cristo se desmayaba;
y como flor de invierno Cristo palidecia.
y siempre caminaba…
O
Y cuando en una cuesta, tremente, dolorido,
Cristo se iba inclinando casi falto de aliento,
de aquel turbión hirviente , de aquel mar removido
ruge la blasfemia como un satán erguido,
triunfa la voz de un bardo con este suave acento;
O
“ Corramos, que ya cae; mirad como se inclina,
“ que palidece y tiembla, que se sedesmaya y muere….
“ Piedad para ese justo que el látigo asesina!
“ Mirad como en su rostro la sangre purpurina
“ semeja un gran incendio que consumirle quiere “
O
Y flotan al instante gritos aterradores
cual canto de montaña bajo la tempestad;
gritos que son agudos dardos desgarradores
que vuelan y se clavan sobre la sien de amores
del bardo que pedía para Cristo, piedad.
O
Y el látigo vibraba más rudo todavia,
y con la Cruz al hombro Cristo se desmayaba,
y como flor de invierno, Cristo palidecía
y apenas caminaba….
O
Y Cristo más no puede. La sangre derramada
en estrellas de púlpura florece en el camino .
La tarde, en el poniente, se entreabre cual granada
y vierte en el Calvario rubìes en cascada
como un chorode sangre sobre un cráneo cetrino.
O
La pompa vespertina derrama su influencia
de amor en los esbirros , de paz en el turbion,
y aquel mar removido siente la somnolencia
del vértigo que vuelve de su rauda demencia
cuando bregó y no pudo vencer a la razón.
O
Y hay un recogimienton de toda gritería
y suelta el manso diálago su ritmo de colmena:
__Por qué lo ultrajan tanto ?
__Dizque por ser Mecías ?
Tercia el poeta y dice : “ Lo ultrjan…
“Quién podria
decir cuál es la causa fatal que lo condena?”
O
Y un fariseo dice: “Por prédica hechisera
Y un siervo de la noche de nupcias en Canaán:
“ Por seductor y brujo, por su vida fiestera:
“ lo he visto cien…mil noches bajo una borrachera,
“ multiplicando el vino, multiplicando el pan…
O
Cristo aún más palidece ;
ya en su mirar no hay luz;
y como flor de invierno se inclina, desfallece
y cae bojo la cruz…….
Por Valentín Giró